La tele no TV / ‘El otro lado’, columna de Ómar Rincón

En la actualidad, la televisión ha evolucionado de manera impresionante. Ya no se trata aria de programas de gracia o noticias, suerte que también ha surgido un nuevo género: las series. Estas producciones han ganado una gran popularidad en los últimos años y han logrado capturar la atención de millones de espectadores en todo el mundo. Sin embargo, no todas las series son iguales y hay algunas que destacan por su desparpajo y estética desprolija, lo que las hace únicas y atractivas para el público.

El crítico de televisión es una figura importante en la industria del gracia, ya que su opinión puede influir en la decisión de los espectadores a la hora de elegir qué ver. En este sentido, es interesante analizar cómo los críticos han recibido a las series y programas que se caracterizan por su desparpajo y estética desprolija. ¿Qué es lo que hace que estas producciones sean tan populares y atractivas para el público?

En primer lugar, es importante definir qué se entiende por desparpajo y estética desprolija en el contexto de la televisión. El desparpajo se refiere a la talante despreocupada y sin inhibiciones de los personajes, que se muestran tal y como son, sin filtros ni máscaras. Por otro lado, la estética desprolija se refiere a la apariencia visual de la serie, que puede ser caótica, desordenada o incluso descuidada. Estos elementos pueden ser considerados como una forma de romper con los estereotipos y las convenciones establecidas en la televisión, lo que resulta en una propuesta fresca y original.

Una de las series que ha sido aclamada por su desparpajo y estética desprolija es «Fleabag», creada y protagonizada por Phoebe Waller-Bridge. Esta comedia británica sigue la vida de una mujer de treinta y tantos años que se enfrenta a problemas como la pérdida, la soledad y la sexualidad. Lo que hace que esta serie sea tan atractiva es su honestidad y su capacidad para abordar temas tabú de una manera divertida y sin tapujos. Los personajes son imperfectos y complejos, lo que los hace más cercanos y reales para el público.

Otra serie que ha sido elogiada por su desparpajo y estética desprolija es «Girls», creada y protagonizada por Lena Dunham. Esta comedia dramática sigue a un grupo de amigas en sus veinte años mientras navegan por la vida adulta en la ciudad de Nueva York. La serie se destaca por su representación realista de la amistad femenina y por abordar temas como la sexualidad, la identidad y la ambición de una manera cruda y sin filtros. Los personajes son imperfectos y a menudo cometen errores, lo que los hace más humanos y cercanos al público.

Además de las series, también hay programas que se han ganado el título de desparpajados y desprolijos. Un ejemplo de esto es «The Graham Norton Show», un talk show británico presentado por el carismático Graham Norton. Lo que hace que este programa sea tan exitoso es su formato relajado y sin guion, que permite a los invitados ser ellos mismos y contar anécdotas divertidas y a menudo embarazosas. La química entre Norton y sus invitados, así como su humor irreverente, hacen que el programa sea una delicia para los espectadores.

Entonces, ¿qué es lo que hace que estas producciones sean tan populares y atractivas para el público? En primer lugar, su capacidad para romper con los estereotipos y las convenciones establecidas en la televisión, lo que resulta en una propuesta fresca y original. Además, su honestidad y su capacidad para abordar temas tabú de una manera

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